Lanzarote se desborda
Los inmigrantes durmieron en Naos tras colapsar el Cate de Arrecife
La llegada de ocho pateras llegadas a Lanzarote a lo largo del lunes desbordó las instalaciones de la isla que no daban más de sí.
Más de 100 personas que llegaron al Roque del Este y posteriormente rescatadas por las distintas Salvamar, ayer lunes día 3 por la tarde, se vieron obligadas a dormir en improvisadas casetas, baños químicos y colchones del Consorcio de Seguridad y Emergencia, en el mismo muelle de Naos. “Fue necesario improvisar un pequeño campamente con todos los servicios con permiso de la Autoridad Portuaria”, explicaba Enrique Espinosa, gerente del Consorcio de Seguridad y Emergencias de Lanzarote.
La avalancha de pateras que vivió Lanzarote, 8 embarcaciones con unas 400 personas de una atacada, en menos de 24 horas, desbordó todas las previsiones y al Cate, el centro de acogida temprana, una especie de campamento con carpas, ubicado en los exteriores de la Comisaría de Policía, con una capacidad de unas 270 personas.
El consejero de Bienestar Social, Marci Acuña, señalaba que “en la medida de nuestras posibilidades nosotros tratamos de echar una mano, de auxiliar y atender a estas personas que probablemente han pasado unos días muy duros y complicados”.
Las autoridades esperan que hoy se empiece a derivar, vía avión a los Centros de Acogidas de Gran Canaria y Tenerife a los inmigrantes para vaciar el Cate de Arrecife. La suerte es que hasta al mediodía de hoy no se ha detectado de momento la llegada de más pateras a la isla. “Ante la previsión de que en los próximos días lleguen más pateras, mantendremos el dispositivo”, señala,
De las 400 personas llegadas en el día de ayer lunes día 3, una veintena se han trasladado al Centro de Menores del albergue de La Santa, en Tinajo. “En Canarias la cifra ya es muy elevada. Hay ya más de 2.500 menores repartidos por las islas”.
El consejero de Bienestar Social aclaró que los menores que viene acompañados se derivan al Centro de Inmigrantes, una especie de nave, en la subida de Argana Alta.
La realidad es que no sólo se ha visto desbordado el Cate, también la Policía Nacional, que precisamente ayer celebraba el día de su patrono, y, sobre todo, las embarcaciones de rescate.
