Estas son las fortalezas del modelo turístico lanzaroteño
La isla repasó todos los puntos fuertes del sector insular en el II Foro de Turismo Ciudad de Melilla
El consejero delegado de los Centros Turísticos, Benjamín Perdomo, se desplazó a finales de la pasada semana hasta la ciudad de Melilla para participar en la mesa Modelos de negocios disruptivos en la industria turística del II Foro de Turismo Ciudad de Melilla, organizado por el Patronato de Turismo melillense y la Universidad de Granada.
En una intervención que se pudo seguir por streaming, Perdomo repasó la historia de Lanzarote desde las erupciones acaecidas en Timanfaya entre los años 1730 y 1736 hasta la actualidad. "La puesta en marcha de la desaladora de los hermanos Rijo y el regreso de Manrique desde Nueva York y la propagación de su discurso entre una población hasta entonces deprimida fueron el origen de la transformación de una isla que ha sabido combinar tradición e innovación hasta ser hoy un ejemplo de destino plenamente maduro y consciente de su rumbo", señaló el consejero delegado de los Centros Turísticos. "Fue él, César Manrique, el auténtico fenómeno disruptivo de la isla. Manrique, y quienes le siguieron en el proceso, José Juan Ramírez y su equipo de colaboradores, además de los pedreros, canteros y trabajadores que participaron anónimamente en la creación de los Centros Turísticos, todo un equipo de personas que fue capaz de lanzarse a lo desconocido sostenido por el liderazgo del genio".
"La semilla que plantó hace más de medio siglo es aún hoy el reclamo de un destino que ha articulado sus líneas estratégicas a partir del equilibrio entre la intervención humana y la protección de la naturaleza" apuntó el consejero delegado de los Centros Turísticos, que desgranó las claves del excelente posicionamiento que disfruta Lanzarote, que son, entre otros, "el valor de sus paisajes, el clima, la cercanía entre puntos de interés, la proximidad al continente, la conectividad, la seguridad, una oferta alojativa y de ocio de primer nivel, y los Centros Turísticos, el auténtico elemento diferencial de un destino que pone todo al alcance de la mano del visitante".
"Lanzarote conserva la esencia de sus pueblos tradicionales a la orilla del océano Atlántico; ofrece una propuesta gastronómica que se ha convertido en un vehículo tractor de potentes flujos turísticos; es un territorio de paisajes únicos conservados por figuras de protección que frenan el vandalismo territorial; es tierra de vinos y de enarenados y de jable y de socos, reclamos para un destino que mira el futuro con incertidumbre, como todos, pero con el optimismo que le proporciona no haber perdido nunca la huella de Manrique" concluyó.