El que tiene en su frente un martillo no ve más que clavos

La Fiscalía anticorrupción de Las Palmas ha presentado escrito de acusación en una de las piezas principales del caso 'Unión', la número 12, que investiga el presunto cobro de comisiones ilegales por parte de miembros del PIL en el Ayuntamiento de Arrecife, donde pide penas de prisión para 14 imputados (entre otras se solicita la friolera de 17 años de cárcel para Dimas Martín y Ubaldo Becerra). Pero al margen de este asunto de presunto cobro de comisiones del Caso Unión, que será la Justicia la encargada de resolver, lo que resulta curioso, es que entre todo este cúmulo de peticiones de penas de prisión, se haya imputado también al empresario Juan Francisco Rosa por haberle dado trabajo a Dimas Martín. Por lo visto, el fiscal entiende que lo hizo para facilitar el tercer grado al ex-político. Y seguramente será así , pero que tiene que ver esto con el asunto de las comisiones que políticos del PIL exigían a determinados empresarios. En algunas fuentes jurídicas no se comprende esta imputación, es más consideran que en este asunto nunca se debió meter al empresario lanzaroteño porque simplemente éste nada tiene que ver con lo que se investiga en esa pieza del Caso Unión, y él mismo ya declaró ante el juez que lo contrató simplemente con la única intención de ayudarle por la amistad que mantenía con el ex-presidente del PIL. Pero esto no sólo es algo muy difícil de entender para quienes parecen levantarse sólo pensando en cómo dañar a una persona, sino que incluso es utilizado para seguir menoscabando la imagen pública en una operación de acoso y derribo contra este empresario. En fin, que el que tiene en su frente un martillo no ve más que clavos. Y los que hablan de moralidad deberían mirarse todos los días en el espejo y ver cómo lograron estudiar en caras universidades privadas.