2 millones de euros para expropiaciones
La noticia de que el Ayuntamiento de Arrecife ha firmado dos decretos por un valor total de 2 millones de euros para pagos por los terrenos que se expropiaron en su día, compromete las inversiones propias para la ciudad. Uno de esos decretos es el de los dos primeros pagos, correspondiente a 2018 y a 2019, de los llamados terrenos de Ginory, frente al Charco de San Ginés, una zona que hoy es utilizada como aparcamiento por parte de los ciudadanos. Como saben, ni este grupo de gobierno ni los anteriores alcanzaron un acuerdo con la propiedad tendente a recoger en el nuevo Plan General de Arrecife edificabilidad en parte de esa zona o darle edificabilidad en otras parcelas de la ciudad que les compensaran. Se optó, por parte del actual grupo de gobierno, por quedarse ese solar para la ciudad a cambio de pagar unos 30 millones de euros, entre el pago principal y los intereses, tras las resoluciones judiciales. En definitiva, que Arrecife hipoteca su futuro por ese solar bajo el criterio del PSOE de que allí no se puede fabricar, como si no hubiera otras salidas intermedias o menos onerosas para los ciudadanos.
De Ginory al Islote del Francés
Y si lo de Ginory ha sido un "palo" para la ciudad, las cosas se pueden complicar más aún cuando, dentro de unos meses, los propietarios del Islote del Francés pidan ejecutar la expropiación de esos más de 50 mil metros cuadrados declarados urbanos en sentencia firme. Ya no estaríamos hablando de 30 millones de euros, sino de más de 90 millones si aplicáramos el mismo justiprecio que los tribunales decidieron para la parcela de Ginory. Si ya la situación de Arrecife y su Ayuntamiento es realmente lamentable, con un personal poco cualificado, unas oficinas técnicas atascadas, un grupo de gobierno flojo y en franca minoría, encima le añadimos la carga de tres o cuatro millones de euros anuales en pago de expropiaciones, ésta se puede complicar todavía más para perjuicio de la ciudad y sus habitantes. Lo de Ginory fue un disparate pero no alcanzar un acuerdo con los propietarios del Islote del Francés puede ser catastrófico. El cuento de que aquello debe ser para uso y disfrute de los cabosos y miñocas ya no cuela. Los propietarios, en vista de lo que hay, ya sólo están esperando la sentencia que obligue al Ayuntamiento a abonarles los 100 millones de euros que ellos creen que cobrarán. Y mientras eso ocurre, aquí, una enredada con las Primarias para ser de nuevo candidata del Psoe y otros mirando al celaje mientras la ciudad desfallece.