Hipocresía e incoherencia
El PSOE ha cargado contra Coalición Canaria a raíz de lo ocurrido en Granadilla de Abona (Tenerife), donde los nacionalistas han sumado sus votos a un concejal del Partido Popular (que anteriormente apoyaba al PSOE contra los criterios de la dirección del partido) y Vox para hacerse con la Alcaldía que ostentaban los socialistas. Ante eso no le ha temblado la voz a la portavoz de la Ejecutiva Insular del PSOE de Lanzarote al decir que el único límite de CC es el poder y que se ha "abrazado a la extrema derecha sin pudor".
Resulta paradójico que diga algo así un partido que gobierna en España sin ganar las elecciones, pactando con Bildu, que es extrema Izquierda y está directamente relacionado con ETA; pactando también con Esquerra Republicana, un partido independentista de Cataluña que nada quiere saber de España y sus problemas; y con Junts, también independentista catalán, cada vez más de derechas y con ciertos tintes xenófobos. No dudó Pedro Sánchez en pactar con ese ramillete de partidos de izquierdas radicales y nacionalistas de derechas o independentistas catalanes que persiguen el destrozo de la unidad territorial de España para mantenerse en el sillón presidencial al precio que sea. Y eso le parece bien a los socialistas lanzaroteños pero en cambio se rasgan las vestidura porque "o tiempo, o mora" en un pequeño municipio de España CC y PP pactan con un concejal de VOX. ¿Es el fin del mundo? La cosa da un poco de risa.
Lo cierto es que lo importante son las políticas que lleven a cabo esos gobiernos. De hecho, es poco probable que en Granadilla de Abona se vayan a llevar a cabo políticas de ultraderecha. Además, sin ir más lejos, en Lanzarote, concretamente en Teguise, el socialista Marcos Bergaz trató de pactar con VOX para poder gobernar en el Ayuntamiento de La Villa. No tuvo éxito, pero si lo hubiera tenido, ¿eso habría convertido a los socialistas lanzaroteños en aliados de la derecha extrema? No. Y por no hablar del caso Sosa que mantuvo a Dolores Corujo en la Presidencia del Cabildo con el voto de un tránsfuga consumado.
El pacto puede no gustar o incluso ser criticable por dar chance a un partido de la derecha radical, pero que lo diga precisamente un partido que está haciendo de todo, incluso pactar indultos para los condenados por sedición y darle el control de las fronteras y la inmigración a Cataluña, solo para poder mantenerse en el poder, es como poco incoherente.
En fin, un poco de "por favor" no estaría mal. Lo malo de hacer el ridículo es no saberlo.
