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La mafia

Por José María de Páiz

 

 

Me da miedo pensar que lo que algunos grupos denuncian en el Cabildo de Lanzarote sea cierto, que en la Primera Institución de la isla esté instaurada la mafia, es decir, una organización delictiva.

 

Es fácil reconocer que estos partidos se refieren la decisión de Presidencia de destituir a un funcionario porque éste era impedimento para legalizar una bodega, o eso dicen. Hasta aquí, bien. ¿Está empeñado Pedro San Ginés en cometer una ilegalidad que muchos están señalando? ¿Se está poniendo la soga al cuello él solito? ¿En seis años no hay más prácticas mafiosas reseñables? Pregunto desde la ignorancia, sabiendo que los planeamientos tienen mucha letra pequeña y, como dice el compañero Domingo Rivero, hasta invisible.

 

¿Por qué el PSOE no para a la mafia desde dentro y, por el contrario, decide marcharse de un pacto desde donde podría fiscalizar y neutralizar al presunto mafioso? ¿Hay más clanes que quieren gobernar la isla? ¿Es esta banda de color rosa, verde o tiene otro matiz? ¿Llevan flores en los puños o son suerte de gaviotas que vuelan de Canarias a Madrid anunciado sumisiones a dictaduras energéticas?

 

¿La tardanza que hay o ha habido en la aprobación de todos los planes insulares, así como los de todos los municipios, es por culpa del crimen organizado imperante? ¿Es por eso lo de las dichosas y recurrentes modificaciones puntuales? ¿Por qué lo que valía en Arrecife hace cuatro años ya no vale a día de hoy? ¿Por qué lo que al PSOE le sirve en San Bartolomé al PP no? Y si los populares en Tías tienen claro cómo ha de ordenase el municipio, ¿por qué los socialistas sólo ven trabas? Y lo mismo pasa en los ayuntamientos donde gobierna CC.

 

¿Es en los planes donde está escrita la letra invisible, donde algunos empresarios pueden beneficiarse de algún favor? Hablamos de planeamientos por no acentuar el tema en las múltiples concesiones que se realizan a los servicios de limpieza, compra de comida y bebida para los CACT, contrataciones de servicios jurídicos, entidades financieras, seguridad, sonido… subvenciones a ONGs, fundaciones, entidades deportivas. concesiones de publicidad, becas, ayudas... ¿Se modifican y se apañan los concursos públicos? ¿Es por eso que sufragan, pagan, patrocinan, donan, en definitiva, corren con los costes de las campañas electorales de los grandes partidos? ¿Es eso? ¿Se puede demostrar? ¿Funciona así la democracia? ¿Sí? ¿Ponemos cara de griegos?

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