“Nosotros reciclamos saris y luego hacemos otras prendas”  

Isabel Sánchez, propietaria de Ishkar Aromas de la India, recibió el tercer premio de la última edición de Lanzarote Emprende

Hablar con Isabel Sánchez es hablar con una apasionada de la India. Una mujer que tras 20 años en el sector hotelero se lesiona y decide emprender en un negocio que aúna a la creación textil y el ‘suprareciclaje’. Su proyecto, además, contó con el respaldo de la Cámara de Comercio que le otorgaba el tercer premio de la última edición de Lanzarote Emprende.

- La primera pregunta no puede ser otra: ¿Qué es Ishkar?

- El significado de Ishkar es “sueño cumplido” en hindi. Es una tienda de moda “slow” que ahora, en contraposición a lo que ahora se lleva como Fast Fashion.

- ¿Qué significa eso de “moda slow”?

- Pues es la contraposición a la tendencia actual de moda rápida, de desechar, de usar y tirar. Es evitar esa práctica de comprar compulsivamente sin darle importancia a la moda que se adquiere. La Moda Slow es una moda lenta, que se hace con conciencia. Son prendas que pretenden tener más durabilidad en tu armario; una prenda de mayor calidad que sea atemporal, que pueda usar en un periodo de tiempo más largo. Además, también se pretende hacer con cierta conciencia de saber quién está detrás de esa prenda que compras.

- ¿Cómo se trabaja en Ishkar?

- Nosotros solemos trabajar con saris realizados en talleres de la India con pequeños fallos que luego nosotros reciclamos para hacer otras prendas. Explicar que los saris son los trajes que utilizan las mujeres de la India y que se componen de varios metros de tela. Y esos saris cuando tienen pequeñas imperfecciones en la tela o en el tinte -se desechan de la cadena de producción. Nosotros cogemos esos saris; yo los intento elegir y luego les reciclamos e intentamos hacer faldas, camisas, trajes para mujeres. De esta manera, además de dar exclusividad a la prenda podemos reciclar material.

- Por curiosidad, ¿el sari de qué está hecho?

- De seda mayoritariamente aunque también se utiliza el algodón, sobre todo el algodón estampado que ellos llama Color Print, que se hace con un sello de madera, con los que impregnan los metros de tela.

- También se vende bisutería, ¿no? Entiendo que también procedente de la India.

- Sí, todo viene de la India. Mucho de lo que tenemos es de la zona de Delhi.

- Toda la ropa que tienen llega de la misma fábrica?

- Todo el material con el que trabajamos proviene de la misma empresa con la que trabajamos, que a su vez se nutre de varias fábricas que desechan el género que no consideran oportuno. El grupo con el que yo trabajo son tres familias diferentes y son ellos los que cogen esos saris, los rescatamos y les damos una segunda vida. Esto se podría llegar a llamar algo así como suprareciclaje.

Hemos hablado de Ishkar, pero no de Aromas de la India. ¿Qué es Aromas de la India?

- El incienso, las esencias, lo que te evoca este maravilloso país.

- Hablemos del incienso. ¿Cómo se debe emplear?

- Para empezar que sea un incienso natural, ecológico, que no tenga químicas añadidas que a veces puede cargar o favorecer el dolor de cabeza. También hay que utilizar el incienso en áreas ventiladas. Hay que recordar que en la India tienen una cultura de meditar y la espiritualidad es el día a día de ellos: la ofrenda, el incienso, la meditación, el yoga…

- Bueno, en la España antigua también se utilizó el incienso en iglesias y catedrales y en lugares cargados de humanidad…

- Según la esencia que tenga el incienso, puede tener distintas utilidades: sirve para limpiar, para traer la prosperidad, para relajar; para eso está la esencia de lavanda, por ejemplo.

- ¿Quiénes son los principales compradores de incienso?

- Hay gente de todo tipo; algunos pueden ser mujeres u hombres que quieren darle un olor especial a sus casas y así no utilizar un ambientador químico y luego está la gente espiritual o gente que le gusta el aroma simplemente.

- ¿Por qué la India? ¿Qué pasó en tu vida que quedó marcada por la India?

- Pues, mira, en 2008, fue mi primer viaje a la India. Yo trabajaba en el Gran Hotel y viajé para aprender una técnica de masaje de allí, yo había trabajado 20 años de masajista. Fui con el billete de dos meses y me quedé año y medio. Fui viajando por toda la India y conocí a mucha gente y familias con las que viví. Después de muchos años, me lesioné y decidí emprender en algo que tuviera que ver con la india. He sido nueva en esto del comercio, pero sin embargo he tenido mucha conexión con la India.