Teatro para celebrar La Noche de los Finaos en Arrecife
“La Casona maldita del puerto”, del director Salvador Leal, trae a la Recova Municipal la obra “El acuerdo”, que narra las historias que se contaban en esta tradicional jornada
“La casona maldita del puerto” es un espectáculo que pretende mantener viva una tradición que se desarrollaba en muchos lugares del archipiélago y que se convertía en una fiesta popular canaria para honrar a los difuntos, los finaos. La noche de los finaos se celebra del 1 al 2 de noviembre, pero con el tiempo se ha ido adaptando a la noche del 31 por la festividad del Día de Todos los Santos.
El Ayuntamiento de Arrecife, presidido por Astrid Pérez, a través de la Concejalía de Turismo, que coordina Armando Santana, trae un año más a la Recova Municipal “El acuerdo”, la tercera representación teatral de la productora Trama2 dentro del proyecto “La casona maldita del puerto” que pretende mantener viva la tradición de la noche de los finaos a través del teatro.
La alcaldesa Astrid Pérez, el concejal de Turismo, Armando Santana, y el director de la obra, Salvador Leal, presentaron esta mañana junto al escenario donde se representará la obra en la Recova Municipal los detalles de “El acuerdo”.
“Como institución pretendemos poner nuestro granito de arena no para ganar una batalla a la noche de Halloween, pero sí para que nuestras tradiciones, como la noche de los finaos, se sigan manteniendo vivas y las conozcan las nuevas generaciones”, según destaca la alcaldesa de Arrecife, Astrid Pérez.
“El acuerdo” se representará el domingo 31 de octubre y el lunes 1 de noviembre en doble sesión a las 19.30 horas y a las 20.30 horas. La entrada es gratuita en todas las sesiones y las invitaciones se están entregando ya a buen ritmo desde el pasado martes 26 en la Oficina de Información Turística de la Casa de la Cultura. El aforo es de 82 personas en cada una de las 4 sesiones. Para recoger la invitación es necesario presentar el DNI, para llevar control de aforo dentro del protocolo Covid-19.
“En la fiesta de los finaos los niños no pedían chucherías, pero sí iban casa por casa con su talega y la gente les daba almendras, higos, castañas. Es una tradición muy bonita que tenemos la responsabilidad de difundir”, según manifiesta el concejal de Turismo, Armando Santana.
“El Acuerdo” es una noche de finaos, una conversación sobre difuntos en una casa imaginaria de La Puntilla en 1892
Este es el tercer año consecutivo del proyecto “La casona maldita del puerto”, y en esta ocasión “El acuerdo”, que narra las historias que se contaban en la noche de los finaos, adquiere un “tono más de comedia”, según apunta el director de la obra, Salvador Leal.
La Recova Municipal se convertirá durante los días 31 de octubre y 1 de noviembre en una casona antigua de La Puntilla en torno a 1892 en cuyos muros los protagonistas nos contarán historias más o menos terroríficas, más o menos divertidas, sobre sus difuntos.
Este año el espectáculo “empieza en la calle, donde la Cofradía de Finaos del Puerto dará la bienvenida a los espectadores que llegan a la Recova Municipal, escenificada para la ocasión como una casona antigua imaginaria ubicada en La Puntilla, en la que se reunía la familia para contar historias de los que ya habían fallecido”, según Salvador Leal, director y autor de la obra.
La tradición de los finaos, dice que durante el día lo niños iban de puerta en puerta por el barrio y preguntaban: ¿Hay santos? La respuesta siempre era afirmativa y los vecinos abrían las puertas de sus casas y ya tenían preparados los frutos secos que entregaban a los chinijos, estos volvían a sus casas contentos por tener sus talegas llenas. Por la tarde se reunían las familias para recordar a los difuntos, a los finaos, se contaban anécdotas y se compartía la comida y los frutos de la temporada.
Ese día se preparaban platos especiales, se asaban castañas, se comían higos pasaos con almendras y la noche se convertía en una fiesta en la que tampoco faltaba el ron miel. Y era entonces cuando se daba rienda suelta a las charlas sobre los finaos, que podían ser familiares, vecinos o conocidos. Con el tiempo la noche de finaos acaba en parranda como cualquier buena fiesta canaria que se precie.