De Lanzarote a La Masía
El joven lanzaroteño Miguel Martín destaca ya en el Barca de Plata de Balonmano
“¡Goool! ¡Vaya trallazo!”. Así se narraba hace apenas dos semanas este gol del lanzaroteño Miguel Martín con el Barca de Plata de balonmano. El jugador, que aún es juvenil de primer año ya se encuentra en dinámica de primer equipo, pero no es algo nuevo para los seguidores del balonmano insular ya que Martín comenzó a despuntar muy pronto con la selección canaria.
Carlos "Chechu" Martín, padre de Miguel Martín, señal que “a partir de que empezó a destacar, se empezó a hablar de él fuera de la isla”.
La estatura del jugador, su destreza y su brazo zurdo despertó el interés del Barca que empezó a realizarle un seguimiento. “Pidieron informes de él que fueron muy positivos”.
Entonces la familia se mudó a Barcelona para tener el primer contacto con el club blaugrana y en apenas unos días de pruebas con 14 años y en categoría Cadete el Barca quiso amarrarle, pero su padre sabía que era aún joven así que le dijeron que era elección suya.
Y finalmente se fue. Ahora, siendo juvenil apunta ya al balonmano profesional y se encuentra en la antesala del máximo nivel. En este encuentro con el Barca B incluso los comentaristas se preguntaban aún quién era ese chico.
Su padre, orgulloso nos cuenta cómo es un día en la vida de Miguel que reside en estos momentos en La Masía. “Entrena de siete y media hasta las nueve y media, desayuna y empieza los estudios, y luego por la tarde, otras dos horas, y con el plata, cuando le toca, tres horas y media”.
Como anécdota su progenitor recuerda cómo comenzó siendo un niño muy pequeño que no tuvo duda a la hora de elegir entre jugar a la pelota con la mano o con el pie
Miguel además, mientras entrena como un profesional también compagina su vida con los estudios, algo que sus padres valoran positivamente, porque en esto del deporte no siempre depende de uno el poder llegar arriba, pero por el momento, Miguel Martín tiene todo de cara para marcar la historia del balonmano insular.