Los rostros de las noticias
Myriam Ybot
Empieza a pasar a menudo que en la baraúnda de actividades que se nos ofrece a la ciudadanía, pasan desapercibidas por novedosas o inesperadas algunas propuestas de gran interés, que quedan huérfanas de público y en la misma medida desaprovechadas.
Aunque podría mencionar otros casos de talleres y conferencias de altísimo nivel que no logran captar la atención social, voy a referirme a la primera edición de Meetings FesTVal Lanzarote, un encuentro profesional del sector audiovisual que se desplegó de manera inédita fuera de su Vitoria natal.
Fruto de colaboraciones previas con esta ciudad, trascurrió en Arrecife uno de estos encuentros, dedicado a la reflexión sobre los desafíos de la televisión en tiempos de plataformas, producción “democratizada” de contenidos, desarrollo tecnológico sin precedentes y bulos a mansalva. Ahí es nada.
Para ello, enmarcado en la iniciativa “Los Desayunos de la Academia”, se reunieron en conversación las primeras espadas de los telediarios nacionales de las tres de la tarde (dos en Canarias), las periodistas, editoras y presentadoras Sandra Golpe (Antena3 Noticias), Ángeles Blanco (Informativos Telecinco) y Alejandra Herranz (Telediario RTVE). Y a su lado, el presentador y director de Atlántico Noticias (RTVC) Roberto González, aportando la mirada local.
Fue la primera ocasión en que se vieron las caras quienes, cada mediodía, compiten en la misma franja horaria por captar la atención de la ciudadanía con el relato de los acontecimientos mundiales, la selección de titulares y la voluntad de que la tele siga siendo primer referente informativo en nuestro país.
Y a pesar la distancia entre empresas privadas y entes públicos, líneas editoriales más o menos marcadas y la lucha permanente por crecer en cuota de pantalla, todas ellas (y él) coincidieron en destacar el ejercicio del periodismo por su indiscutible condición de servicio público, la importancia de estar a pie de calle, con empatía hacia lo que preocupa a la gente y el uso de un lenguaje llano y accesible para todas las personas.
En un contexto en el que los informativos son considerados columna vertebral y elemento diferenciador de las televisiones generalistas, es notable la presencia de mujeres al frente de los equipos editoriales, que a diario construyen la realidad para un público masivo. Aunque, de nuevo de forma unánime, las tres profesionales reclamaron “el asalto a los despachos”, la última meta de la igualdad en las empresas de comunicación.
El futuro de la tele es una incógnita, dijo alguien. La desinformación y los bulos, junto a la conversión de las redes en fuente informativa sin cauce para la respuesta o el contraste, son los retos actuales de los medios audiovisuales convencionales, que se esfuerzan en incorporar tecnologías que hagan el soporte más atractivo, faciliten la comprensión de las noticias y garanticen el rigor y la veracidad de lo que se cuenta.
Porque si antes se trataba de llegar el primero al lugar de los hechos, de rozar el cielo de la exclusiva, ahora la meta es ganar en credibilidad y ser referencia en investigación fidedigna, honestidad y pulcritud. Sin duda, un noble desafío.
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