Entre el sectarismo y la estupidez
Un representante del Comité de Empresa de los Centros Turísticos ha enviado una carta al consejero delegado, Benjamín Perdomo, donde piden que eliminen del Consejo de Administración de los CACTs a la representante de Asolan, Susana Pérez. Los motivos de tan llamativa petición, no se sabe muy bien cuáles son, más allá de que dice que "torpedea " la gestión de los Centros. Imaginamos que el consejero delegado de los Centros Turísticos no hará ni caso y no cambiará los estatutos para excluir a la Asociación Turística que representa los intereses de la mayoría del sector que trae y hospeda a los turistas a esta isla, pero todo es posible. Lo que realmente se esconde en esta "extraña" petición del representante del Comité de Empresa es que Asolan ha recomendado, tanto internamente en el Consejo de Administración como en los medios de comunicación, ampliar el horario de apertura y cierre de los Centros Turísticos en fechas especiales como las Navidades, Semana Santa y en los meses de julio y agosto. Asolan no pide eso como puro capricho sino porque entiende que con ello la experiencia y la calidad de la visita mejora. También, ha sido crítica Susana Pérez con las colas insufribles que, en determinadas fechas, sufren los turistas que quieren visitar Timanfaya. Pues para ese miembro del Comité de Empresa de los CACTs eso le parece que es torpedear y no unas atinadas peticiones por parte de la asociación que representanta al 80% de las camas turísticas de la isla.
Peticiones de Asolan razonables
Las peticiones de Asolan serán oportunas o no, a simple vista parecen al menos razonables. De ahí que llame la atención la petición de expulsar a esa asociación del Consejo de Administración que obviamente persigue lo mejor para la industria turística de la que vive Lanzarote y, por supuesto, los Centros Turísticos y sus 370 trabajadores. A veces da la sensación de que algunos trabajadores de los CACTs se creen dueños de los Centros Turísticos. Una cosa es que sean piezas fundamentales del negocio, lo es cualquier trabajador en una empresa, y otra cosa es que crean que nadie puede opinar para mejorar lo que no funciona bien o simplemente es mejorable. Las colas de Timanfaya no son culpa del consejero delegado actual o, mejor dicho, siempre han existido en fechas claves. Eso no significa que Asolan no lo pueda denunciar o que no se le pueda exigir mejorar ese problema. O qué se dé prisa para que la promesa de las famosas lanzaderas de Mancha Blanca se pongan en marcha lo antes posible. No caigamos en el sectarismo y luchemos todos para mejorar Lanzarote y sin duda los Centros Turísticos que, a pesar de sus buenos resultados económicos (gracias, sobre todo a la recuperación del Turismo, y a aciertos de Benjamín Perdomo), tienen todavía problemas a resolver.
