CC "rompe" el Complejo

CC, tras cuatro años en la oposición en el Cabildo y de subalterno en Arrecife, sólo gobernando realmente en Teguise y Tinajo, está fuerte y mostró toda su musculatura en el acto de presentación de candidatos celebrado el jueves, por la noche, en el Complejo de Teguise. Unas mil personas acudieron a la llamada, la mayoría simpatizantes y militantes nacionalistas que quisieron poner en escena su mejor cara. Llenar una nave de gente, ver el entusiasmo por regresar a la primera línea, con un Oswaldo Betancort, desatado por la euforia, y un Echedey Eugenio apostando por cambiar Arrecife, no es cosa menor, más bien es cosa mayor en estos tiempos dónde el "kilo" de público está por las nubes. Sin duda, fue un gran día para la familia nacionalista que sabe que es ahora o nunca. Que saben lo que se juegan ellos y Lanzarote en estas elecciones. La oportunidad para acabar con la política de retrovisor desplegada por el PSOE, más empeñado en destruir todo lo que se había realizado en los últimos 10 años por San Ginés, que en ponerse a tope a resolver los grandes retos de la isla.

Ilusión y votos

Sin duda CC aprobó con notable alto, rayando el sobresaliente, en su particular pistoletazo de salida. Su puesta en escena es convincente y deja claro que salen a por todas, que quieren ganar estas elecciones, que quieren un cambio con mayúscula. Pero eso es una cosa y otra que crean que conseguir eso va a ser fácil. La ilusión mueve montañas y ayuda a ganar elecciones, pero mucho más tendrá que ofrecer este proyecto nacionalista si quiere que el pueblo lanzaroteño lo apoye mayoritariamente. El esfuerzo de la organización nacionalista es loable, y ha espabilado tras el bajón que sufrió en las anteriores elecciones cuando se llevaron del varapalo de quedarse fuera del Cabildo por 200 votos y un pacto contra natura del PSOE-PP que los dejó en la oposición cuando estaban preparados para gobernar. CC ha empezado bien, pero lo importante en estas lides es como se termina.