Canarias apuesta por las renovables, ¿y Lanzarote?
Valentía, eso es lo que solicitaba esta semana el presidente de Canarias a la hora de apostar por las energías renovables en las islas, aunque eso suponga que la colocación de aerogeneradores y placas fotovoltaicas consuma territorio. El objetivo es, por decirlo así, un bien mayor: descarbonizar el archipiélago antes de 2040. No se puede seguir quemando gasoil y Torres lo tiene clarísimo. Hay que instalar placas fotovoltaicas, energía eólica en tierra y mar, apostar por el almacenamiento, y hay que hacerlo, aunque signifique ocupar parte de nuestro espacio o perder algo de estética. Se trata de un pensamiento lógico y acorde con lo que pide Europa y con un partido que apuesta por la sostenibilidad y el medio ambiente.
¿Hechos o palabras?
Lo que resulta chocante, en cambio y en contraposición con el pensamiento sostenible de Torres, es que otros miembros de su propio partido no actúen igual. Y es que en Lanzarote, isla Reserva de la Biosfera, no se ha apostado por la sostenibilidad y el medioambiente en los últimos cuatro años más que en los discursos. Ahí, sí, que para algo el gobierno es progresista y de izquierdas. Lo cierto es que la isla no cuenta con más parques eólicos, ni fotovoltaicos que en la legislatura pasada y los motivos no son otros que el hecho de que estas instalaciones ocupen territorio y sean poco estéticas. De hecho, se han prohibido dos parques solares y uno eólico. ¿La excusa? La necesidad de tener un plan para aprobar estos parques, plan que no ha salido en todo este tiempo. Habrá que ponerse de acuerdo y decidir si la isla quiere subirse al carro de las energías limpias, que por otra parte se impone en toda Europa, o quiere seguir hablando de ellas en un futuro potencial que nunca acaba de llegar.
Toca ser valientes
Lanzarote, como el resto de Canarias, lo tiene todo para dar este necesario salto que Europa nos está exigiendo. Tiene más horas de luz que gran parte del continente y la fuerza del viento es especialmente fuerte. Eso por no hablar de otras energías como la maremotriz o la geotérmica. Lo único que no tiene son las instalaciones adecuadas, y las que hay están funcionando a medio gas. La excusa no puede ser la ocupación de territorio, ya no. Ahora toca ser valientes. Palabra de Ángel Víctor Torres.