Recorrido por el sur insular con paisaje primaveral
Para este fin de semana les proponemos una ruta por los atractivos paisajes sureños y una cena en el Castillo de San José que cambia su carta con motivo de la llegada de la primavera
Las últimas lluvias han teñido Lanzarote de verde y han cubierto la siempre árida tierra conejera de un manto de flores que resulta, por poco habitual, muy atractivo visitar. Por eso, para este fin de semana, les proponemos una ruta fuera de la capital insular y más centrada en el placer de contemplar la naturaleza que en otras actividades de ocio.
La primera parada de nuestra ruta, sería una visita a las impresionantes Montañas del Fuego, uno de los centros turísticos más relevantes de la isla. Es imprescindible realizar la ruta de los volcanes, un recorrido espectacular de 14 kilómetros acondicionados para esta visita. El disfrute está garantizado, más aún si en esta ocasión se pueden contemplar los impresionantes volcanes con un rastro de flores primaverales. La duración de esta primera parada es de unas dos horas y el precio desde 9 euros.
Recorrido el interior de la tierra, es el momento de coger el coche rumbo al sur para visitar los Hervideros, la zona de El Golfo de Yaiza y las salinas del Janubio. Todo ello conforma un paisaje que transmite toda la belleza de la naturaleza en estado puro. El atractivo de la fuerza del mar que rompe contra las rocas en Los Hervideros, es tan sólo superado, si cabe, por el verde intenso del Charcho de los Clicos y la erosionada playa de El Golfo o el blanco contra de Las Salinas. Un paisaje diferente que explica, en parte, la salvaje naturaleza insular.
Nada mejor que una parada, si el tiempo acompaña, para darse un baño en las playas de Papagayo, dos kilómetros de arenas doradas y playas vírgenes ubicadas en el Monumento Natural de Los Ajaches. Tras el baño, un pequeño recorrido en coche hasta Playa Blanca y tan solo hay que elegir un lugar para comer en la amplia oferta del municipio turístico sureño. Muy recomendable optar por algún pescado fresco canario, unas lapas, unos burgaos o unas gambas de La Santa y, claro está, algún vino blanco lanzaroteño.
Por la tarde, el recorrido permite visitar el pueblo de Yaiza y la Iglesia de Los Remedios, construida en 1728 y formada por dos naves desiguales, dos capillas laterales y dos dependencias a los lados del altar mayor, conserva su arquitectura original de estilo mudéjar. El pueblo es de pequeñas dimensiones pero francamente bonito y merece un recorrido caminando por el mismo. De la misma forma, aconsejamos parar en la pequeña localidad agrícola y ganadera de Uga, conocida por albergar a casi todos los camellos de la isla y por contar con una ahumadería de salmón de auténtico lujo. Destaca la iglesia de San Isidro Labrador, su plaza central, la arquitectura canaria de sus calles y su mercado de los sábados.
La subida, de regreso a la capital, es recomendable por el espacio protegido de La Geria, conocido por su paisaje volcánico y especialmente bello en primavera. Muy recomendable parar en alguna de las bodegas y disfrutar del vino local.
Cena de lujo en el Castillo
Por la tarde noche, regresamos a la capital de la isla para disfrutar de la nueva oferta gastronómica que propone, desde el viernes 23 de marzo, el restaurante QuéMUAC, en el Castillo San José.
Alberto Nieto, chef ejecutivo de los Centros, entiende que la llegada de la nueva estación es un “buen momento para redimensionar la propuesta gastronómica del Castillo con algunos platos sorprendentes, tanto por su originalidad como por la combinación de sus ingredientes”.
De esta forma, en el epígrafe de Platos para compartir, el equipo de profesionales de las cocinas de QuéMUAC suma el Rulo de cabra planchado, tomate confitado, lechugas tiernas de Teguise aderezado con perlas de granada; el Carpaccio de gamba con vinagreta de jengibre y germinados; el Ceviche de corvina marinada en leche de tigre con millo de la isla; el Pulpo a la plancha macerado en mojo rojo sobre batata yema ahumada y el Risotto de magret de pato, boletus, foie y parmesano. O la Crema fría de fresas, mango y carabinero planchado y los Raviolis de queso, baicon y dátiles salteados con cherry y champiñón.
Las cocinas del centro se nutrirán de productos de la tierra y de primera calidad para regalar a sus comensales las ricas y tradicionales Costillas deshuesadas con piña, setas y foie con papas panaderas y las Chuletillas de cordero, puré de papa bonita, migas con chorizo y papas. Del mar llegará el siempre exquisito y sinónimo de éxito Pescado de la isla relleno de burgaos, espinacas frescas, tomate cherry, nueces y papas.
Una manera más que deliciosa de darle la bienvenida a la primavera.