Generalmente, las grandes firmas son las más innovadoras en cuanto a digitalización de la profesión. Esto como es lógico también sucede en el sector de la abogacía. Los grandes despachos, aquellos que cuentan con sedes en todo el mundo, llevan bastantes años invirtiendo sus recursos en la conocida como LegalTech.

En la actualidad, la mayoría de estas grandes firmas pertenecientes al sector legal utilizan estas nuevas tecnologías en sus servicios al cliente y los resultados obtenidos no podrían ser mejores.

¿Cuáles son los beneficios del software para abogados?

Los programas que existen hoy en día permiten ahorrar mucho tiempo y facilitan el trabajo de los abogados. Se pueden encontrar programas que calculan las probabilidades de éxito de una demanda en los tribunales, lo cual hace que el profesional no tenga que pasarse horas y horas estudiando la jurisprudencia de un caso concreto. Incluso hay programas capaces de elaborar un borrador de contrato.

Por su parte, el software de abogados Aranzadi Fusión permite al profesional mejorar la rentabilidad y productividad de su despacho. Además, algunos de estos programas permiten llevar mejor la gestión y el control de los documentos sin limitaciones de espacios. El abogado podrá compartirlos en tiempo real, lo cual hace posible que otros compañeros puedan hacer correcciones o introducir comentarios.

Hay que tener en cuenta que para gestionar expedientes se necesita un sistema capaz de manejar, organizar, proteger y gestionar cada uno de ellos, y es que si el abogado tuviera que revisar una a una las páginas que conforman un expediente, perdería muchísimo de su valioso tiempo. Cabe mencionar que estos programas son muy seguros, garantizando así la protección de los datos.

¿Cómo impactan las nuevas tecnologías en el sector de la abogacía?

A pesar de que cada vez más abogados utilizan estas nuevas herramientas, todavía hay muchísimos pequeños y medianos despachos que no lo hacen, lo cual sin duda alguna es un completo error, ya que actualmente existe una gran competencia en cualquier sector. Por lo tanto, es fundamental adaptarse a las nuevas tecnologías, ya que estas han llegado para quedarse.

No obstante, el sector legal ha demostrado con creces que sabe adaptarse al cambio. Nadie podía imaginar hace tan solo dos décadas que se podría recibir una notificación judicial o revisar un contrato desde un smartphone o cualquier otro dispositivo móvil.

Los avances tecnológicos permiten la automatización de muchos procesos. Gracias a ellos la comunicación se ha vuelto diferente y muy rápida. Además, el abogado no tiene por qué estar necesariamente en su despacho para llevar a cabo su trabajo, ya que podrá hacerlo sin ningún problema desde cualquier parte siempre que cuente con un dispositivo con conexión a Internet.

La evolución hacia la digitalización sigue su curso y con el paso del tiempo se podrán ver aún más cambios en el sector de la abogacía. La tecnología facilita el día a día de las personas y con su ayuda los abogados pueden ser incluso más efectivos.