La noche en que los Conejeros recibieron al Real Madrid en la Ciudad Deportiva Lanzarote
Algunos de los nombres más grandes e históricos de la historia del fútbol llegaron a Arrecife en la Copa del Rey hace casi 25 años
El 28 de noviembre de 2001, el archipiélago fue testigo de una de las noches más memorables de la historia del futbol libre. El equipo recibió en su estadio, la Ciudad Deportiva Lanzarote, a algunos de los más grandes nombres de la historia del fútbol para disputar una eliminatoria de Copa del Rey contra el Real Madrid, un acontecimiento que aún resuena entre los aficionados al fútbol de la zona casi 25 años después.
La UD Lanzarote se había ganado su puesto en esta tercera ronda a pulso con el CD Tenerife. A pesar de estar luchando en la liga en ese momento, estaban preparados para este partido histórico.
Pocos días antes de este monumental partido, el Consejo de Administración liderado por Estanislao García realizó un cambio significativo con la contratación de David Amaral como entrenador. Amaral debutó como entrenador de la UD Lanzarote en este partido de Copa del Rey.
Desgraciadamente, a pesar de sus esfuerzos a lo largo de la temporada, la UD Lanzarote descendió a Segunda División B a su conclusión, pero siempre le quedaría el recuerdo de esta histórica noche bajo los focos.
El Real Madrid afrontó este partido con la máxima seriedad bajo la dirección de Vicente Del Bosque. Presentó una alineación repleta de estrellas en la que destacaban los porteros César e Iker Casillas, además de jugadores de campo como Geremi, Pavón y Michel Salgado, entre otros, como Zinedine Zidane y Luis Figo.
David Amaral eligió a Marino, Arroyo y Pedro Cruz, entre otros, para su once inicial contra los blancos, que tuvieron que emplearse a fondo para derrotar a los Conejeros, que terminaron la primera parte con empate a uno en el marcador.
La noche fue inolvidable para los más de 10 mil espectadores que presenciaron en directo el choque de estos titanes sobre el terreno de juego, mientras millones sintonizaban la televisión nacional o el pago por visión. El público se emocionó al ver sobre el terreno de juego a jugadores del calibre de Zidane y Figo.
En la segunda parte, el Real Madrid alineó a César, Raúl Bravo y Aitor Karanka, entre otros, mientras que Del Bosque tuvo que confiar en Figo y Zidane para remontar el partido.
La UD Lanzarote se defendió con firmeza del Real Madrid durante toda la primera parte, en la que Vladimir marcó el empate en el minuto 41 tras el gol de Celades para el Real Madrid. Sin embargo, en la segunda parte, Guti adelantó al Real Madrid, y Pavón amplió su ventaja, haciendo el 3-1.
La isla de Lanzarote quedó completamente cautivada por la reciente eliminatoria de octavos de final de la Copa del Rey, un acontecimiento trascendental que ha quedado grabado en los anales de su historia deportiva.
Un día antes del partido, más de 5.000 personas acudieron a la Ciudad Deportiva Lanzarote para presenciar el entrenamiento del Real Madrid. Los aficionados estaban ansiosos por tener la oportunidad de ver a sus ídolos en acción y, posiblemente, incluso hacerse una foto con ellos. Esta abrumadora afluencia de público puso de manifiesto no sólo la popularidad del Real Madrid, sino también la expectación que rodea a su participación en esta eliminatoria.
La emoción no se detuvo en la sesión de entrenamiento. Sólo para este partido se vendieron más de 10.000 entradas, una cifra impresionante que habla por sí sola de su importancia. El partido fue retransmitido a nivel nacional mediante pago por visión y por la Televisión Canaria para los telespectadores de la región del archipiélago.
Esta amplia cobertura permitió batir récords de audiencia, con una recaudación de más de 50 millones de pesetas, lo que demuestra la repercusión de este acontecimiento entre los aficionados al deporte de toda España.
Este acontecimiento histórico catapultó a la UD Lanzarote a las portadas de los medios de comunicación nacionales durante varios días seguidos. El frenesí que rodeó la visita del Real Madrid puso a la UD Lanzarote bajo un intenso foco de atención, que puso de relieve tanto su potencial como club de fútbol como su papel de anfitrión de uno de los partidos más vistos de España.