La cirugía láser ocular mejora una visión más nítida
Cada día más personas recurren a la cirugía láser ocular para poner fin a sus problemas de vista. Pues, las cirugías láser se han establecido como intervenciones seguras y sencillas.
Hoy en día, es posible corregir un amplio repertorio de condiciones visuales. Desde miopía, hipermetropía, astigmatismo, presbicia hasta cataratas. Casi cualquier dificultad visual puede aliviarse si se acude a un experto en cirugía ocular.
Contrario a lo que se puede pensar, la cirugía láser es más simple y fiable que la cirugía tradicional. Es mucho menos invasiva, por lo que consigue una recuperación del paciente mucho más rápida. Así, en poco tiempo se disfruta de una visión nítida y ojos libres de gafas.
La oftalmología es una de las ramas de la cirugía que más ha progresado en los últimos tiempos. Se han desarrollado nuevos métodos y herramientas para la cirugía ocular. Uno de los más conocidos y efectivos lo constituye la cirugía con láser.
Sin embargo, a la par que la oftalmología avanza también lo hacen las afecciones de la vista. El uso constante de teléfonos, tablets y ordenadores, ha desencadenado una epidemia que cada día causa más daños. Esto representa un grave problema de salud a nivel mundial.
Además, la falta de educación en temas de cuidado de la vista causa indiferencia ante las causas más comunes de estas enfermedades. La escasa iluminación en oficinas y estudios, por ejemplo, es una de las principales causas de las afecciones visuales.
Esto ha ocasionado que problemas como la miopía o el astigmatismo proliferen entre la población, especialmente en niños y adolescentes. Que se convierten en adultos con enfermedades visuales progresivas, con un sentido de la vista cada vez más dañado.
Técnicas recomendadas de cirugía ocular
La cirugía láser ocular, también conocida como cirugía refractiva ha logrado grandes resultados en términos de salud visual. Su propósito es solventar los problemas más comunes como la miopía, hipermetropía y astigmatismo.
Sin embargo, el desconocimiento y temor acerca de sus alcances impiden que este tipo de cirugía atienda una mayor cantidad de pacientes.
Así, la cirugía correctiva con láser se centra principalmente en dos clases: LASIK y PRK. Ambas pretenden reducir la necesidad de usar gafas. El uso de una u otra técnica es determinado por el especialista, según el diagnóstico realizado previamente.
Cada una se corresponde a un procedimiento específico. En el primer caso, las intervenciones realizadas bajo el esquema LASIK, se emplea con la intención de librar al paciente de las gafas. Para ello se procede a levantar la capa dispuesta sobre la córnea, luego se coloca una lente intraocular y finalmente se coloca nuevamente el fino tejido sobre la córnea sin suturar.
Este tipo de operación está enfocada a personas adultas que de acuerdo al diagnóstico padezcan una condición refractaria. Ofrece una rápida recuperación con muy pocos cuidados posoperatorios requeridos.
Por su parte, la cirugía PRK, también conocida como Lasek, remueve la capa superficial de la córnea.
Este tipo de intervención se recomienda principalmente a personas con córneas delgadas que no puedan someterse a la intervención del primer tipo. Se recomienda sólo para mayores de 21 años, excluyendo diabéticos y embarazadas. Tampoco se aconseja este tipo de intervención en personas con problemas visuales no refractarios tales como glaucoma y cataratas.
Ambas poseen una impresionante tasa de éxito con más de un 90% de pacientes que recuperan la vista por completo. Siendo la cirugía LASIK la más empleada a nivel mundial en la corrección de problemas visuales como miopía, hipermetropía y/o astigmatismo.
Salud visual en España
Los estudios revelan que los problemas visuales y su consecuente ceguera serán una nueva epidemia mundial. Y los resultados muestran que cada día estamos un paso más cerca de esa realidad.
Por ejemplo, en España cerca de un 50% de jóvenes y niños españoles poseen alguna deficiencia visual. En no pocas ocasiones, estas no son tratadas adecuadamente por desconocimiento de los padres.
La presbicia y el astigmatismo, se ubican en el segundo y tercer lugar de las enfermedades más sufridas en España. Siendo Extremadura la región más afectada por este tipo de condiciones visuales. En el lado opuesto de la recta, encontramos a Murcia y Cantabria con sólo un 65% de la población presentando afecciones visuales.
Por su parte, el glaucoma es una de las principales causas de ceguera en España. No existe cura para esta enfermedad, sin embargo, el tratamiento y la cirugía pueden ayudar a ralentizar el proceso de pérdida de la visión. Lamentablemente, la visión perdida a causa de la enfermedad no puede recuperarse.
Las cataratas son responsables de que una parte importante de la población acabe con imposibilidad visual total o parcial. Sin embargo, ésta es quirúrgicamente curable. Siendo los principales afectados las mujeres de 35 años en adelante, aunque la frecuencia de casos en varones, también está aumentando.