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La reciente celebración del Día del Ahorro (31 de octubre) es una oportunidad perfecta para reflexionar sobre la importancia de construir un futuro económico estable que nos lleve a la libertad financiera.

 

Demasiado a menudo, la falta de educación financiera y la inmediatez del presente nos impiden ver más allá y planificar adecuadamente nuestro bienestar a largo plazo.

 

A pesar de estos hándicaps, adoptar una mentalidad de ahorro e inversión es realmente importante para sacar el máximo rendimiento a nuestros ingresos. Sobre todo en un momento en el que la incertidumbre económica y los desafíos demográficos amenazan con poner en jaque nuestros planes de jubilación.

 

Pero, ¿cómo podemos alcanzar la libertad financiera? ¿Qué significa realmente este concepto? En este artículo, te explicamos todo lo que tienes que saber y las opciones que existen, desde la apertura de una cuenta sin comisiones hasta las diferentes posibilidades de ahorro que ofrecen los depósitos.

 

La importancia del ahorro sistemático

 

La libertad financiera es la capacidad de vivir sin preocupaciones económicas gracias a que hemos preparado un “colchón financiero” que nos permite cubrir nuestras necesidades y alcanzar nuestros objetivos, o poder hacer frente a la falta eventual de un salario o ingresos regulares. Es un estado de tranquilidad y autonomía que nos da la oportunidad de tomar decisiones financieras sin presiones a corto plazo.

 

Para lograrlo, es esencial establecer un plan de ahorro sistemático que se convierta en la piedra angular de este camino hacia la libertad financiera. Gracias a la adopción de buenos hábitos de ahorro, podremos estar protegidos en situaciones inesperadas.

 

Por ello, no hay que esperar a la jubilación o los años inmediatos a ella. Cuanto antes empecemos, más seguridad y tranquilidad tendremos desde el punto de vista económico. De este modo, comenzar a ahorrar en la juventud, incluso con pequeñas cantidades, puede tener un impacto significativo en el futuro. La constancia y la disciplina son claves para que el ahorro se convierta en un hábito duradero.

 

Opciones de inversión a largo plazo

 

Una de las mejores opciones para empezar a ahorrar es la apertura de una cuenta sin comisiones y remunerada. Estas cuentas son ideales para aquellos que buscan rentabilidad sin complicaciones, ya que las entidades financieras suelen dar un porcentaje de interés por tener cierta cantidad de dinero en la misma.

 

No obstante, hay bancos que ni tan siquiera exigen un mínimo de dinero. Con solo la apertura de la misma, el titular puede empezar a obtener rendimientos por su dinero que, en la actualidad, ronda el 2%. Además, es importante incidir en que no cobran comisiones de mantenimiento, transferencias o tarjetas, lo que es un plus a la hora de incrementar los ahorros.

 

Otra opción muy interesante para empezar a ahorrar antes de la jubilación es el depósito ahorro. Entre los existentes, el depósito a plazo fijo es el más seguro al ofrecer estabilidad y bajo riesgo. Si bien es cierto que la rentabilidad en estos momentos no es la más alta de los últimos meses, hay entidades financieras que pueden llegar a alcanzar intereses en torno al 3% en función de si se cumplen una serie de requisitos.

 

Diversificación de inversiones

 

Estos depósitos, además, se pueden complementar con otras estrategias de inversión, ya que también es importante comenzar desde pronto a diversificar nuestros ahorros para conseguir la máxima rentabilidad y alcanzar esa libertad financiera tan deseada.

 

Planes y seguros de ahorro, planes de pensiones y fondos de inversión son herramientas que entran dentro de este capítulo. Cada una de estas opciones tiene sus propias ventajas y niveles de riesgo. Por ejemplo, los fondos de inversión permiten acceder a una cartera diversificada de activos, mientras que los planes de pensiones son una herramienta clave para la jubilación, permitiendo ahorrar a largo plazo con ventajas fiscales.

 

Adoptando hábitos dirigidos a la diversificación estaremos minimizando nuestra exposición al riesgo, asegurándonos de que no dependemos solo de una fuente de ingresos. Así, protegemos nuestro patrimonio de posibles caídas del mercado.

 

Asesoramiento financiero

Si desconoces de lo que estamos hablando y de las diferentes opciones que ofrece el mercado, o simplemente tienes miedo, es aconsejable buscar un asesoramiento experto para profundizar sobre estas opciones, conocer realmente los riesgos y, sobre todo, las oportunidades que dan a la hora de conseguir la libertad financiera.

 

Las entidades financieras cuentan con personal cualificado en asesoramiento financiero que te ayudarán a aclarar dudas y, en caso de estar conforme, diseñar una estrategia personalizada para empezar a ahorrar y tener un poco más cerca esa libertad económica buscada.

 

Una libertad financiera que, como ya hemos dicho, requiere disciplina, planificación y una estrategia. Por eso, hay que empezar adquiriendo el hábito del ahorro sistemático. Gracias a él, la libertad financiera no es un sueño inalcanzable.

 

No esperes más: comienza hoy mismo a tomar el control de tu economía. Abre una cuenta sin comisiones, planifica un depósito ahorro y busca el asesoramiento de un profesional. Tu libertad financiera está al alcance de tu mano. ¡Actúa ahora y asegura tu futuro!