El Lobo
Andrea Bernal
Igual que lobo callado,
sin tropiezo,
al acecho, al acecho.
En otras tierras,
huésped anónimo,
tras el helecho.
Al perro miedoso,
adiós.
Bajo tierra,
con rugido de un viento interior,
al acecho, al acecho,
ha venido.
Qué vértigo en las nubes
y qué poca verdad aquí.