Denuncia el mal trato sufrido por su hijo en el Molina Orosa
Un padre indignado
Me dirijo a ustedes para protestar por el mal trato que ha recibido un enfermo ingresado en el Hospital Doctor Molina Orosa para una operación.
En concreto, me refiero a mi hijo, que el pasado 25 de abril tenía concertada una operación. Estaba previsto que ingresara a las siete de la mañana, por supuesto en ayunas. Cenó el día anterior a las ocho de la tarde y no comió, ni bebió nada, ya que no podía hacer hasta la operación.
Tal y como estaba previsto, ingresó a las siete y cinco de la mañana del viernes 25 en la planta de cirugía y, una vez allí, tenía que esperar a que vinieran a buscarlo para la operación.
La espera se prolongó hasta pasadas las dos y media de la tarde, hora en la que el médico apareció y le dijo que se fuera para su casa porque no lo iban a poder operar en esa jornada, ya que el personal se tenía que marchar a las tres “y no iba a dar tiempo”.
Mi hijo, que no daba crédito, le expuso su situación y les recordó que llevaba desde el día anterior sin comer, ni beber, tal y como le habían pedido. E increíblemente fue el médico el que miró con mala a cara a mi hijo.
Me parece lamentable el trato que ha recibido y la falta de humanidad de ese facultativo en concreto.
Visto lo visto, les aviso: no se les ocurra ponerse malos o tener un accidente después de las tres, porque a esa hora, se ve que ya no atienden.