Vandalismo en la Cueva de los Siete Lagos
Se han encontrado numerosas pintadas en su interior a pesar de llevar cuatro años cerrada.
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Lancelot Digital
A pesar de llevar cuatro años cerrada, la gente sigue accediendo a la Cueva de los Siete Lagos de forma incontrolada. Prueba de ello es que ha sido objeto de un nuevo acto de vandalismo encontrándose numerosas pintadas en su interior.
En noviembre de 2012, el Cabildo decidió cerrar la entrada a la Cueva de los Siete Lagos para impedir “el acceso incontrolado, inseguro y peligroso” y conservar así “la estructura volcánica y preservar los endemismos y fauna invertebrada” que se encuentran en este lugar. Y es que, ya entonces se habían producido actos vandálicos en su interior.
De esta forma, se colocaron unas rejas a la entrada, limitándose el acceso a universidades, centros docentes o entidades de investigación, estudio y conservación, así como otras de carácter turístico y fines didácticos que lo requirieran, debiendo cursar la autorización correspondiente en el Cabildo.
El pasado 14 de mayo, tras recibir permiso especial de Medio Ambiente, el compañero de Lancelot Televisión, Sergio Calleja, accedió a la Cueva de los Siete Lagos para hacer un reportaje sobre el estado de la misma. Durante tres horas de recorrido, tres policías nacionales expertos en espeolología y dos periodistas comprobaron que las rejas de entrada habían sido forzadas con un gato hidráulico y que sobre todo los primeros 200 metros de la cueva están afectados por las pintadas, lo que constituye un atentado contra el patrimonio de Lanzarote.
La Cueva de los Siete Lagos pertenece al tubo volcánico del Volcán de la Corona y se encuentra próxima a la Cueva de los Verdes y a Jameos del Agua. Con unos 700 metros topografiados, es probablemente la cavidad de mayor interés para la práctica de espeolología en Lanzarote. A ella se accede a través de un jameo vertical de unos 10 metros de altura.
