Los vigilantes del Área de Salud, 22 días sin cobrar
La Gerencia del Hospital Molina Orosa está tratando de solventar la irregularidad de la empresa concesionaria
Los vigilantes del Área de salud de Lanzarote denuncian la precaria situación en la que se encuentran ya que, a 22 de abril, aún no han cobrado las nóminas correspondientes al mes de marzo.
Señalan que la empresa a la que están subrogados tiene sus cuentas embargadas por impagos a la Seguridad Social, por lo que no tienen ninguna esperanza de cobrar. “El cliente contratante del servicio, que es la Gerencia del Área de Salud de Lanzarote, está haciendo entrevistas a empresas de seguridad con un presupuesto deficitario, que todas las empresas serias y solventes están rechazando sin miramientos por lo que nosotros los trabajadores seguimos trabajando sin cobrar”, señalan.
Esta no es la primera vez que ocurre esto. En 2020, tal y como recuerdan, ya la empresa les comunicó una posible entrada en el concurso de acreedores y ya comenzaron con los problemas de pagos en las nóminas. Se ha denunciado en Inspección Laboral, pero desde entonces nunca hemos cobrado antes del día 5. “Cobramos, del 15 al 19, y este mes a 22 de abril aún no hemos cobrado. Y no es el primer mes que cobramos pasa esta fecha”, señala, apuntando que la Gerencia está informada, y saben que la empresa, que contrataron sin que salieran a concurso público, no nos paga. “El último concurso se celebró en 2018, así que la Gerencia está incurriendo en una irregularidad”.
Así, por su parte, desde el Área de Salud de Lanzarote han señalado que hace días se está tratando de solventar la irregularidad de la empresa concesionaria. Por ello, desde la Gerencia hospitalaria ya han indicado que se está estudiando la situación que afecta a estos trabajadores y, en todo caso, no se descarta proceder a la resolución de la actual concesión a la empresa en cuestión para volver a licitar dicho servicio de vigilancia.
Quieren que la Gerencia haga una oferta seria, acorde con las necesidades de pago para que las empresas solventes quieran acceder al servicio. “Al final están asumiendo el servicio las empresas más incumplidoras, y no podemos estar así”, señala.