La confusión de los tests y los confinamientos retraen las reservas turísticas
El sector turístico lanzaroteño sigue pidiendo el control absoluto de las puertas de entrada a la isla, tanto a turistas como al resto de los viajeros
La curva del optimismo turístico está loca. Hoy está arriba y mañana toca suelo. Y es que cuando ahora la pandemia está controlada en Canarias a la baja, en los países emisores sube como la espuma en los últimos días. Y por si fuera poco Canarias y España no se aclara con lo tests a los viajeros que entran a la isla. La confusión es lo peor para un turismo que busca seguridad y claridad.
“No debemos distinguir entre turistas y no turistas, sino que tenemos dos puertas de entrada a Lanzarote y hay que controlarlas. Y lo cierto es que, tal y como está el decreto, no sabemos es, si los hoteles solo les van a hacer test a sus turistas, qué hacemos con los vienen a viviendas vacacionales, a viviendas no controladas, a ver a sus familias, a ver a sus amigos… esos también pueden traer el virus”.
Ángel Vázquez, consejero de Turismo del Cabildo de Lanzarote, cree que España y Canarias no hicieron los deberes a tiempo e insiste de la necesidad de una normativa europea.
“Me da mucha pena porque hemos perdido mucho tiempo. Llevamos siete meses ahora de pandemia y, desde febrero, estamos pidiendo lo mismo: normativa europea y tener control absoluto sobre todo el que entra a la isla”, señala.
Ahora que Alemania y Reino Unido, nuestros principales clientes, nos levanta la veda y dejan a sus ciudadanos viajar a Canarias, son ellos a los que se les ha descontrolado la pandemia.
“Ahora que es cuando no se pueden hacer corredores seguros quieren hacerlos, ahora que todos están peor que nosotros… había que haberlos hecho antes”, explica. “Esa habría que haberlo puesto en marcha en marzo… y es una pena y muy triste que no hayamos podido hacer nada por todos los pequeños empresarios que no tienen suficiente músculo económico como para aguantar esta situación”.
Lo positivo es que los alemanes, los ingleses y en general los europeos quieren venir a Canarias, los touroperadores tienen los aviones preparados, los hoteleros canarios tienen un 40% de la planta hotelera disponible abierta, pero lo peor es que ahora no se saben si esos turistas pueden moverse de sus países por el confinamiento decretado en muchos de ellos.
