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Frigo y el Cabildo de Lanzarote, unidos por el empleo juvenil

29 jóvenes de entre 16 y 30 años venderán helados durante seis meses por toda la isla

 

Texto: Lancelot Digital
deo: Lancelot Televisión

 

El Cabildo de Lanzarote y la empresa de inserción laboral Trampolín Solidario han firmado un acuerdo para impulsar el empleo entre universitarios y jóvenes en riesgo de exclusión social de la isla. Con el acuerdo, que se enmarca en un convenio marco entre la empresa de helados Frigo y ENSIE (red internacional de empresas de inserción a la que pertenece Trampolín Solidario), Lanzarote se suma a la iniciativa “Soy Frigo”, un proyecto de ámbito mundial impulsado por Unilever y que tiene como objetivo crear 5 millones de empleos en todo el mundo hasta 2020, para combatir el grave problema de la alta tasa de desempleo.

 

Los participantes en la iniciativa tendrán la posibilidad de gestionar durante el verano un dispositivo (moto, bicicleta, carrito…) de venta de helados como si fuese su propio negocio. Antes de llegar a las calles, los jóvenes del programa “Soy Frigo” recibirán una formación en la que se les enseñarán técnicas de venta, control de stocks, manipulación de alimentos, contabilidad, marketing y redes sociales, con el objetivo de mejorar sus aptitudes y capacidades para gestionar su puesto de helados y, sobre todo, para su empleabilidad futura.

 

Frigo prevé conseguir 17 licencias municipales para generar un empleo directo de hasta 29 jóvenes de Lanzarote. Estarán ubicados en zonas de alta afluencia turística, como playas, mercadillos, plazas y lugares emblemáticos de la isla. En mayo comenzarán los primeros vendedores, que además empezarán a recibir formación una semana después de tener las licencias de venta por parte de los municipios.

 

Quienes quieran participar en el programa, podrán inscribirse a través de la web www.frigo.es. Esta empresa ha diseñado para los participantes de “Soy Frigo” cuatro tipos de puesto, que recuerdan los modelos clásicos de la venta de helados del siglo pasado: una bicicleta, una moto, una nevera y un carrito. Los jóvenes recibirán el dispositivo de helados, y, a partir de ahí, ellos serán los encargados de todo lo demás durante el tiempo que dure su participación en el programa: reposición de helados, creación de técnicas para dinamizar las ventas, seguimiento de la contabilidad, etcétera.

 

La duración de la participación en el programa variará en función de las necesidades específicas de cada zona. Por ejemplo, habrá participantes que vendan helados en festivales, fiestas y actividades locales, para quienes el periodo de empleo dependerá de la duración del evento, y habrá otros que estén ubicados en playas, en las que el periodo de ventas se alargará hasta el final del verano.

 

Una vez concluida esta primera fase del programa, Frigo ofrecerá un premio a los tres mejores vendedores, basándose en el volumen de ventas y la originalidad de la dinamización. Entre estos premios estará la posibilidad de hacer unas prácticas remuneradas en Unilever.

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