Isla Bonita 30 años de tradición
El ayuntamiento de Teguise ha reconocido y distinguido su larga trayectoria como referente de la cocina tradicional canaria
La celebración del Día de Canarias se fijó en el calendario el 30 de mayo, coincidiendo con el día en que quedó constituido formalmente el Parlamento de Canarias, en virtud a los resultados electorales de las elecciones autonómicas.
Pero más allá del dato meramente institucional, ese día refleja la a identidad de un pueblo que se construye cada día a través de su gente, sus símbolos, la forma de expresarse, su cultura, el respeto por las tradiciones y sus raíces, que conforman la pluralidad del archipiélago canario. Su gastronomía se caracteriza por su sencillez, variedad y riqueza de ingredientes, gracias a los productos de la tierra y el mar de las islas y a los múltiples aportes culturales que ha recibido a lo largo de su historia.
Está fecha tan señalada siempre me gusta celebrarla recordando la cocina tradicional canaria, la que ha puesto las bases de la nueva cocina canaria, a través de sus platos más representativos.
Para tan placentero menester que mejor que a acudir al restaurante Isla Bonita, que durante más de 30 años lleva ininterrumpidamente preparando con mimo y rigor las recetas de siempre, las de toda la vida, transmitidas de generación en generación hasta nuestros días. Elaboraciones y sabores que nos evocan tiernos recuerdos, en muchos casos de madres y abuelas en los fogones, momentos en familia que perduran en la mente, el espíritu y el corazón.
Con la ayuda de Borja, que ha sustituido a su padre al frente del negocio y un equipo de sala y cocina consolidado desde el principio de la actividad, nos dejamos llevar por las bases y fundamentos de la cocina tradicional conejera.
Para preparar el cuerpo que mejor que un buen “caldo millo”. Luego ya fue todo seguido, un gran recital: “tollos en mojo hervido; conejo en salmorejo; fritura de cochino y, redondeando el menú un suculento sancocho con gofio escaldado y mojos”. De postre las tradicionales “torrijas caseras y mil hojas de merengue”. Todo bien acompañado de Malvasía Volcánica seco de Bermejo y mecidos entre folias, isas y malagueñas.
Durante la semana, todos los días (excepto los domingos que cierra), ofrece dos platos de cocina canaria además del menú, uno de cuchara.
Lunes: caldo millo y pulpos estofados.
Martes: potaje de lentejas y conejo en Salmorejo.
Miércoles: arvejas compuestas y sancocho.
Jueves: puchero canario.
Viernes: costillas de cochino con piña, papas y mojo cilantro. Cabra compuesta
Sábado: caldo mero y cochino negro al horno.
El Ayuntamiento de Teguise, recientemente le hizo un merecido reconocimiento a José Luis Guillén Berriel, más conocido por Pepe, a través de su alcalde Oswaldo Betancort, por su trayectoria ininterrumpida de 30 años ejerciendo la actividad de restaurante en Costa Teguise.
Pepe se ha ganado el afecto y cariño de sus clientes y amigos, siempre con buena cara, sonriendo, saludando a todos, uno por uno. Disfruta más que nadie, su mayor satisfacción es comprobar que todos salen felices y contentos después de un buen almuerzo o cena.
Conversando con él, en sus “cuentos o relatos”, rara será la vez que no haga alguna alusión a La Vegueta, de donde procede, “el macho de La Vegueta”. Tampoco falla el de el cura Don Tomás, que decía: “si Lanzarote es un huevo, La Vegueta es la yema” o que la capital de Tinajo es La Vegueta. Seguro que nadie que se precie de conocerlo no haya oído algunas de estas frases, ni una, ni dos ni tres veces……
En una de las fotos pueden leer el artículo que escribí cuando celebraba su veinte aniversario, si lo abren un poquito más en la pantalla de su dispositivo. Se encuentra enmarcado a la derecha en la entrada del restaurante. Han pasado 10 años, pero su contenido continua plenamente vigente.
