Proteger para desproteger
La incoación de expedientes de Bienes de Interés Cultural (BIC) realizada por la Unidad de Patrimonio del Cabildo de Lanzarote en las últimas semanas puede ser el tiro definitivo para que Arrecife se muera. No se sabe si hay unas intenciones claramente políticas del PSOE para perjudicar a los promotores de determinados edificios de la calle Real, para que tiren la toalla y dejen caer esas construcciones al piso, mientras se termina de arruinar a la ciudad, tal y como denuncia el Partido Popular, o simplemente es un acto de irresponsabilidad tan grosero que asusta por la gravedad de sus consecuencias.
El patrimonio de Arrecife agoniza desde hace años por diversas causas. Posiblemente tenga una de las calles reales más abandonadas y feas de Canarias por el fracaso evidente de las instituciones y por culpa de una política patrimonial alejada de la realidad. Ya en el pasado se cometieron disparates como los de tirar edificios con evidentes valores históricos y culturales interesantes de conservar. Eso provocó que hoy la fotografía del centro de Arrecife esté formada, por una parte por edificios modernos de bloques de entre 50 y 20 años, la mayoría, bastantes inocuos y más bien feos, hecho que refleja una sociedad pobre y con mal gusto artístico, y por otro por casonas antiguas, la mayoría del siglo XIX o principios del siglo XX , en un estado de mantenimiento deplorable. Tal es así, que algunas simplemente se han caído al piso en los últimos años.
Nadie sabe muy bien que busca el equipo de Dolores Corujo con esos BIC, algunos a la carta, como el del antiguo Hotel Oriental donde los propietarios llevan años martirizados por las diferentes administraciones por tratar de rehabitar lo máximo posible la estructura antigua, manteniendo la fachada del edificio, que sea posiblemente lo único de valor que posee, más allá de algún otro elemento constructivo de menor calado. O el intento del Cabildo de impedir que los propietarios del Mercadillo de la calle Real puedan mejorar ese edificio con una rehabilitación respetuosa que mejor lo hoy existente.
¿Por qué opinamos que esos intentos de declarar BIC ciertos edificios de Lanzarote puede ser la ruina definitiva de la capital?. No sólo por el desánimo al que han llevado a los promotores o familias esa injusta e irresponsable “jugada política del Psoe” que dejará a esos edificios a su suerte durante años con el consiguiente aumento del deterioro sino por el mensaje negativo que envía a otros inversores que pudieran empezar a creer en ayudar a “salvar el centro y alrededores” .
Los BIC del Cabildo se han convertido en un auténtico misil en la línea de flotación de la política de progreso que comenzaba a vislumbrarse en la capital con la nueva administración, tras años de recesión y el mandato para olvidar de la socialista Eva de Anta.