“Me veo como un tiburón blanco que si deja de nadar se hunde”

El historietista David Rubín reconoce que no son muchos los privilegiados como él que pueden hacer de su pasión su principal fuente de ingresos

David Rubín debe ser de los autores más prolíficos que existen en el panorama nacional, tanto en número de obras como en las diferentes historias que ha tratado en una carrera que está cerca de sumar tres décadas. Su trabajo ha tenido trascendencia en España y fuera de nuestras fronteras con proyectos como Beowulf que vio la luz en 2013 y del que se siente especialmente orgulloso. Pero quienes lo siguen saben que en la veintena de publicaciones que llevan su firma ha sido capaz de adaptar obras clásicas, crear historias de superhéroes, de detectives e incluso ahora se ha atrevido con un western que saldrá el próximo año. En sus comienzos se dedicó al cine y participó en la película El espíritu del bosque, en 2006 ganó el premio revelación del Salón del Cómic de Barcelona y ha recibido múltiples nominaciones al Eisner. Él mismo explica su trayectoria.

-Me veo un poco como un tiburón blanco que si deja de nadar se hunde. Necesito estar constantemente trabajando y sabiendo qué es lo siguiente que voy a hacer. Ese es mi truco para sobrevivir en este mundo; estar siempre en movimiento. No hay otra. Es la única forma de ir consiguiendo más lectores con cada libro nuevo, de manera que si les gustas también intentarán encontrar todo lo anterior que hayas hecho. Así toda tu bibliografía se sigue imprimiendo y vendiendo. Ese es el truco. Es evidente que no es fácil vivir de esto.

-Pero eres de los pocos privilegiados que en España pueden dedicarse exclusivamente a este trabajo.

-Hay de todo. En este país hay gente que vive de esto mucho mejor que yo y gente que malvive o que va tirando pero sigue ahí. Y luego hay un montón de dibujantes que no consiguen sobrevivir de esto a tiempo completo, como ocurre con cualquier arte, la música, el teatro. Tengo amigos y amigas en un montón de disciplinas artísticas y pocos son los que han conseguido que su talento y su pasión sea su principal fuente de ingresos. Normalmente tienes que compaginar una cosa con la otra, como hice durante los primeros años en los que me dedicaba al dibujo y también, por ejemplo, al cine.

-Sí, porque has estado involucrado en el cine con películas animadas conocidas como El espíritu del bosque.

-Sí, los diez primeros años mezclé el dibujo con el cine. La suerte es que era algo bastante guay y que me permitía compatibilizar ambas disciplinas de manera que cosas que sabía o aprendía del cine las aplicaba en el cómic y viceversa. Descubrí nuevos caminos en el cómic gracias a mezclar una cosa con la otra.

-Dentro del mundo del cómic y dada la cantidad de temáticas que has abordado cuáles serían tus preferencias, los superhéroes, el realismo… ¿Cómo definirías tu estilo?

-Creo que un estilo se va cimentando a base de ir aprendiendo de los errores de manera que cuando los cometes vas buscando y coleccionando pequeños trucos para ir tapándolos o subsanándolos y así vas cimentando lo que se suele llamar un estilo propio. No considero mi estilo realista, ni lo pretendo, ni poco figurativo, creo que bebo de muchas fuentes y consigo poderme amoldar a todo tipo de historias porque soy bastante permeable. Me gusta escribir, pero también trabajar con guionistas de distintos lugares del mundo, con diferentes sensibilidades y con los que puedes entenderte bien y funcionar como si fueras uno solo.

-¿De todas las temáticas que has abordado cuales son las que más te atraen?

-Ninguna en concreto. Rara vez repito un género o estilo concreto, he hecho un poco de todo, desde biografías a superhéroes, dramas, comedias, acción, terror… prácticamente he pasado por todos los géneros que se pueden abordar en el cómic. De hecho, ahora mismo estoy trabajando con un guionista llamado Jon Bilbao en una obra que saldrá el próximo año que va a ser un western, uno de los pocos géneros que no había tocado.

-Tenías curiosidad.

-Sí, y además me gustaban bastante los western y de hecho Jon Bilbao es mi favorito del panorama nacional. En cuanto surgió esta posibilidad y nos conocimos en seguida nos unió nuestro amor por el western.

-Con respecto a premios veo que te concedieron en 2006 el del Salón del Cómic de Barcelona por La Tetería del Oso Malayo y has estado múltiples veces nominado al Eisner.

-En el Eisner he estado nominado en varias candidaturas, pero nunca lo he ganado pero sí tengo otros más aunque la verdad es que me da bastante igual. El principal premio es que cuando saques un libro guste y se venda.

-También has realizado adaptaciones de obras clásicas. ¿Supone un reto o una responsabilidad especial?

-No, lo que he hecho fue hace muchos años. Era Romeo y Julieta y La Montaña de las Ánimas de Bécquer. Fueron trabajos primerizos y tengo buenos recuerdos de ellos pero no es una temática que sea habitual en mi obra.

-Ahora mismo el panorama nacional del cómic parece bastante polarizado entre los dibujantes de superhéroes y los de conciencia social o política siempre desde una visión progresista. Al final a uno le surge la pregunta y la curiosidad, ¿existe algún dibujante de derechas?

-Sí, como en cualquier otro sector hay gente de derechas y de izquierdas, lo que pasa es que los de derechas, en general no suelen ser muy buenos. Pero no creo que haya polarización de ningún tipo, lo que hay es más oferta y más variedad temática y artística que nunca.

-¿En qué lugar te situarías dentro de esa variedad temática y artística?

-Siempre he sido abiertamente de izquierdas, tanto en el trasfondo de mis obras como en mis comentarios en redes sociales.

-Me refiero más bien a dónde te situarías en cuanto a superhéroes o temas sociales.

-No creo que haya esa gran diferencia. Puedes hacer superhéroes con una visión social y temas sociales con un punto de vista heroico. En septiembre voy a presentar un tebeo sobre el Joker de DC Cómics que tiene un trasfondo social y político y que también es de superhéroes.

-Una pregunta que siempre hacemos es la opinión de los dibujantes sobre la Inteligencia Artificial.

-Pues lo veo muy mal. Si de verdad se utilizara como una herramienta para cosas útiles para la sociedad, mola. Pero ahora lo que veo es que quita puestos de trabajo y le está complicando mucho la vida a los que quieren dedicarse a esto. A mí no me va a quitar el puesto de trabajo después de tener una carrera tan larga. Me apena y duele sobretodo por esos chavales y chavalas que vienen detrás de mí, se quieren dedicar a esto y se encuentran con este escollo terrorífico que les va a quitar un montón de trabajo y los va a convertir en totalmente prescindibles. Además, estás robando el trabajo de miles de compañeros porque las IA se aprovechan del esfuerzo de los demás y sin obtener ningún tipo de beneficio.

-A parte de todo ello, al ser gratuita ahora aparecerán un montón de dibujantes y de dibujos hasta el punto de que se podría saturar el mercado con obras sin calidad.

-En realidad se llenará de personas que quieren engañar a la gente y que no tienen ni idea de lo que están haciendo y eso se nota enseguida. Las editoriales se han dado cuenta y de hecho están incluyendo cláusulas en los contratos para asegurarse de que no usas absolutamente nada de IA en tu trabajo. Ya que la ley que debería ampararnos ante estos abusos va lenta y no acaba de legislar de forma correcta, pues al menos está bien que desde el sector se tomen medidas. Pero sé que en el cine y en los videojuegos sí que está cayendo muchísima gente y en el editorial se recurre a la IA para resolver cuestiones como las portadas y eso se nota en la calidad final. De hecho, ya hay librerías que se niegan a vender y devuelven ejemplares si ven algo que haya sido hecho de esa manera.

-En Canarias se dio el caso de que un Ayuntamiento eligió un cartel del carnavales dibujado con IA.

-Eso se debe a que la gente que participa en los jurados no tiene ni idea, podrían estar en concursos de carteles o de pasteles de manzana, ven el más bonito y lo eligen aunque sea evidente que es hecho con IA. Lo único que consiguen es devaluar el acto que van a celebrar y demostrar el poco cariño que han puesto a la hora de organizarlo.

-¿Conoces el Libro Blanco del Cómic? ¿Cuál es tu opinión?

-Me parece muy bien que exista, es muy positivo para el sector.

-¿Es cierto el rumor de que vas a venir al Salón del Cómic de Tenerife?

-Pues no lo sé, algo me han dicho pero no creo que se haya concertado del todo. Estaría encantado de ir y de hecho estuve hace unos años y me encanta el salón y Tenerife pero en esta ocasión creo que todo está en el aire todavía.