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Una réplica sólo para adultos

 

Por Guillermo Uruñuela 

 

  • Guillermo Uruñuela
  • Cedida
  •  

    Escribo estas líneas tras haber leído el artículo de mi compañero, Fran J. Luis, el cual les facilito a través del siguiente enlace (pinche aquí).

     

    En él defiende su postura en torno a la paternidad. No creo que a día de hoy existan padres que juzguen a una persona que decida no tener hijos y tampoco pienso que se den estas críticas en sentido contrario. Luis me comentaba cómo era frecuente toparse con la pregunta, "¿no vas a tener hijos?"; algo que por su discurso hoy en la redacción pienso que le molesta. En mi caso, a la gente le interesa saber cuándo voy a parar de soltarlos por el mundo. Creo que nunca me ha molestado; es más siempre explico que estoy en el proceso de creación del cuarto. Tema zanjado.

     

    En su artículo ensalzaba los espacios "only adults" que a mí me parecen también acertados. En general cuanto más extensa sea la oferta, independientemente del campo, es más fácil dar con lo que buscas pero también muchas veces en la vida no queda otra que aguantarse un poco. Eso de la lluvia y el gusto de todos. Etc. 

     

    Ahora, si me permites amigo Fran, voy a proponer algunas ideas de futuro aún no instauradas para ver si llegan a manos de alguien que me pueda ayudar.

     

    Me molestan los colocados en las discotecas porque sin quererlo te puedes ver envuelto en una refriega con un tipo con las neuronas calcinadas. Deberían de hacer test de drogas a la entrada de los clubs. También sería acertado crear vuelos para personas delgadas porque si te toca una gruesa al lado, con las dimensiones actuales de los aviones, pasarás medio viaje pegado pierna peluda con pierna peluda o depilada, según se tercie. Invito a que alguien cree restaurantes con medidor de decibelios para echar a esos plastas, borrachos en muchos casos, de la mesa de al lado que te fríen con sus risas y gilipolleces.

     

    Otra idea sería que en las maquinas expendedoras de café incluyesen, leche de soja, leche de avena, leche de coco y mala leche, así, para todos los gustos. Lo demás sería discriminar y molestar a los que quieran una especialidad definida del lácteo.

     

    En el transporte público se podía prohibir la camisetilla de tirantes, y más en verano. Podrían ser las guaguas de "only sobaco tapado" y así podríamos respirar tranquilos los que no queremos asfixiarnos con olores no deseados.

     

    La verdad que se me ocurren otras muchas cosas, pero la cosa se podría extender. Admito y tengo que reconocer que en una cosa tienes toda la razón. Hay que respetar y ser educado cada cual en la posición que le corresponda. Y ese ejemplo de niños alborotando de noche en un bar en mitad de una cena, el blanco de diana no deberían de ser los chiquillos sino los padres que eligen, por su interés, un plan inadecuado para unos niños.

     

    Dicho lo cual, los míos como tú dices son lo más maravilloso que poseo y eso no quita para que muchas veces acabe hasta arriba de ellos. Pero en esos momentos, por suerte te tengo a ti, que además de ser un tipo al que aprecio y admiro, cuentas con piscina en casa y no tienes hijos. 

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