Força al Canut...

Le oí decir al Presidente Clavijo, al ser preguntado, que ese asunto de los catalanes, de apelar a nuestro modelo canario fiscal diferenciado, con nuestras supuestas ventajas, para pedir el oro y el moro para sus tribus, es una auténtica pamplina. Y es verdad, actitud propia de elementos que se creen por encima del bien y del mal, y del resto de los españoles. 

No tengo nada contra ese pueblo estupendo, pero a sus dirigentes se les ha ido la olla desde hace mucho tiempo. ¿A quién webos se le ocurre comparar a Canarias con Cataluña...? Igualitos que somos la verdad. Nosotros, al menos, no andamos todo el día con aquello de “salut i força al canut”, o sea, desear que se tuviera buena salud y que no faltase dinero dentro del canuto de monedas.

Ya ven, el catalán es pal dinero como cochino pa cáscaras. Existe una variante del saludo que es mucho más explícita: «Salut i pessetes i el demés a fer punyetes» (Salud y pesetas y lo demás a hacer puñetas). Vamos, que si le tocas la pela, te mandan al carajo...Lo cierto es que los catalanes tienen una deuda escandalosa porque han vivido como les ha dado la gana. 

Mientras comunidades, como la Canaria, se apretaban el cinturón, hasta deformarlo, con la contención y la regla de gasto en las épocas de vacas flacas, allí estaba el Pages Catalán, bebiendo Brut con su Canut, comiendo Fuet y abrazando a la Longaniza, viviendo la vida bella. Y ahora reclaman lo que ellos llaman “privilegios canarios”. Los privilegios de una tierra con la inflación y precios más altos de España y los sueldos más pobres. Hay que ser miserable...

Menos mal que este sentimiento de llenar el Canut a costa de los más necesitados es patrimonio de unos cuantos colgados, pseudo políticos que atufan a caca,  y que viven bien instalados en la opulencia de una insolidaridad apestosa. Que nos dejen en paz y dejen de tocarnos los “collons”. Y que el canut les reviente. Como decía el inolvidable Porky: “E..e..eso es todo, amigos”.