El cambio llegó en los 90
Andrés Martinón
Entrevisté hace un par de semanas a un prestigioso crítico. Vino a Lanzarote por su amor a nuestra isla y su devoción por la Muestra de Cine. Entre que yo no paro de hablar (y más si es de esta disciplina artística) y que él es argentino, no tardaron en llegar diversos intercambios de opiniones. Cuando vi que entraba al trapo, pensé: “Esta es la mía” y le lancé una de mis más firmes teorías: “El cine a partir de los años 90 ya nunca fue tan bueno”. Le expliqué que hacía alusión a la aparición de internet y la irrupción de los p2p y la brutal piratería y que esto provocó la desaparición de una clase media de películas que antes se hacía en los grandes estudios y que derivaría en dos tipos de cines que abundan ahora: las grandes superproducciones tipo Marvel o superhéroes o, por contra, las películas de autor que no animan al descargador ilegal a darle al botón de “download”.
Le dije que ya no se hacían películas como 'Atrapado en el tiempo', 'Héroe por accidente' o 'Dave, presidente por un día' y me entendió, pero sí afirmó que se sigue haciendo ese cine y lo derivó a la importancia de acudir a las salas y vivir la experiencia física, hecho que le di la razón pero que no me convencía pues no iba al meollo de la cuestión.
Pasaron unas semanas y llegó a mi perfil de Facebook esas sugerencias que el algoritmo cree que te va a gustar y que muchos dicen que de esta manera Zuckerberk te domina, pero, si he de ser sincero, la mayoría de estas sugerencias me gustan (debe ser que ya me tienen dominado). Era una secuencia del 'Sexto Sentido', de la que ya no me acordaba y era cuando el niño protagonista que decía aquello de “en ocasiones veo muertos” le explicaba a su madre que la abuela quería decirle a ella cosas que no pudo decirle en vida. La escena es tan potente que me saltaron las lágrimas de los ojos como gotas de medio litro (de esas que se pierden entre la lluvia) y pensé que esta película protagonizada por Bruce Willis (¡¡¡Bruce Willis!!!), de índole súper comercial, hoy en día ganaría el premio al Festival más alternativo, exigente, cultural o lo que se tercie.
“Los Buggles decían eso de Video Killer the Radio Star en alusión a la aparición de la MTV, pues yo creo que Internet mató una parte del cine que se hacía antes”
Yo no creo que el cine muriera en los 90, como me respondió el excelente crítico, simplemente que cambiaron las reglas del juego. Y es que esto es extrapolable a la música, cuando en los años 80 y 90 se hacía una música intermedia excelente, sin necesidad de ser Michael Jackson o Nirvana pero sí de gran calidad apoyada en unos estudios que ofrecían a los jóvenes rockeros músicos de calidad para perfeccionar sus creaciones.
Además, entrevistaba hace un tiempo a Daniel Ferrer, un joven lanzaroteño, que ha diseñado un videojuego que ha sido adquirido por PlayStation y Nintendo y decía algo similar: que ahora o se hacen videojuegos de superproducción o muy alternativos. Que ya no hay esa anteriormente citada clase media.
Termino recordando que ya Los Buggles decían eso de Video Killer the Radio Star en alusión a la aparición de la MTV, pues yo creo que Internet mató una parte del cine que se hacía antes.