Lanzarote protege su paisaje con un Plan Especial de La Geria

La administración de Oswaldo Betancort trata de dar seguridad a bodegueros y viticultores, sin los que no existiría este paraje único en el mundo

El actual Plan Especial del Paisaje Protegido de La Geria retoma un proceso iniciado hace más de quince años y paralizado desde 2010, cuando la COTMAC aprobó de forma parcial el documento que debía ordenar el espacio vitivinícola más emblemático de Lanzarote. Aquel plan quedó suspendido en parte por cuestiones técnicas y, después, olvidado durante la última legislatura, la de la socialista Dolores Corujo, sin avanzar en su tramitación ambiental ni en su aprobación definitiva.

La nueva administración insular ha decidido reactivarlo con el objetivo de dar seguridad jurídica a bodegueros y viticultores, preservar el cultivo tradicional en hoyo y frenar el abandono agrario. El borrador establece una zonificación más clara del territorio, limita las construcciones no agrícolas, vincula el tamaño de las bodegas a la superficie de viña cultivada y refuerza el control sobre las extracciones ilegales de rofe, el lapilli volcánico esencial para el viñedo. El documento, clave para garantizar el futuro del paisaje vitivinícola más singular de Lanzarote, fue remitido el 18 de octubre al Órgano Ambiental Insular, primer trámite técnico necesario para desbloquear un proyecto que lleva más de quince años esperando ver la luz.

El Cabildo prevé aprobar el plan de forma inicial a comienzos de 2026 y alcanzar su aprobación definitiva antes de mayo de 2027, lo que pondría fin a una de las tramitaciones más largas y controvertidas del planeamiento insular.

Desde el área de Política Territorial celebran este avance como "una excelente noticia para el campo y el sector vitivinícola", ya que el plan ordenará un espacio donde las bodegas no solo elaboran vino, sino que sostienen con su actividad el paisaje tradicional de hoyos y zocos de piedra que caracteriza a esta comarca.

La estabilidad de las bodegas, como elementos estructurantes del paisaje, es clave para este documento, ya que sin ellas no existiría el propio paisaje de La Geria.

Un documento enterrado de manera deliberada

Durante el mandato de Dolores Corujo, el plan no avanzó ni un solo paso. Ni siquiera se sometió a tramitación ambiental. Diversas voces del sector vitivinícola han denunciado que el documento fue "enterrado" deliberadamente por "intereses inconfesables" vinculados a alguna bodega concreta, sin que la expresidenta ofreciera jamás una explicación convincente.

Mientras tanto, los sucesivos presidentes del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Lanzarote insistían en la necesidad urgente de contar con un marco de ordenación que garantizara el futuro del sector. Y es que, sin bodegas activas y competitivas, difícilmente se podrá preservar el paisaje que ha convertido a La Geria en un símbolo de la identidad insular.

La decisión de desbloquear ahora el plan no solo representa un avance administrativo: es también un acto de reparación política tras años de abandono. Lanzarote no puede permitirse más tiempo perdido en la defensa de uno de sus paisajes más emblemáticos.

¿Qué se espera del nuevo plan?

Zonificación por niveles de protección
Se divide el área protegida en tres zonas: natural, de convivencia agrícola y central (solo cultivo tradicional en hoyo). Esto busca preservar el paisaje y limitar transformaciones agresivas.

Protección del cultivo en hoyo
En la zona central solo se permite el cultivo en hoyo, prohibiendo otras técnicas para proteger el suelo volcánico y la estructura tradicional.

Relación bodega / superficie agraria
Para instalar o ampliar una bodega, se exige un mínimo de 2.000 m² de viñedo, evitando bodegas sin respaldo agrícola real.

Lucha contra el abandono y extracciones ilegales
Se sancionarán el abandono de fincas y la extracción ilegal de rofe (lapilli volcánico), esenciales para la conservación del viñedo y el paisaje.

Incorporación de núcleos poblacionales
El plan reconoce viviendas existentes y propone soluciones para su habitabilidad y servicios, evitando dejar a residentes sin regulación clara.

Equipamientos y bodegas existentes
Se regulan las condiciones para la ampliación y mejora de bodegas actuales, permitiendo su adaptación al nuevo marco legal.

Participación y consulta pública
El Cabildo ha abierto mesas de trabajo y un periodo de consulta pública, buscando legitimidad y participación de los afectados.

Evaluación ambiental estratégica
El plan está en fase de evaluación ambiental, trámite obligatorio que puede modificar sus determinaciones según los resultados.

Calendario estimado
Se prevé la aprobación inicial en 2026 y la definitiva antes de mayo de 2027, importante para seguir el avance y posibles retrasos.

Incentivos económicos / subvenciones
Se contemplan ayudas económicas para evitar el abandono agrícola y recuperar fincas, aunque se recomienda investigar los incentivos concretos.

Reconocimiento cultural y turístico
El plan busca valorizar el paisaje vitivinícola, vincularlo al turismo sostenible y reconocer el papel de bodegas y viticultores en la preservación del entorno.

Restricciones de construcción / uso urbanístico
Se regulan edificaciones y usos no agrícolas para proteger la morfología tradicional, lo que puede generar tensiones con propietarios.