El hidrógeno verde puede ser la energía del futuro
Ya tenemos claro que las energías verdes son el futuro (algunas ya forman parte del presente) y entre ellas parece que una de las que más prometen es la proveniente del hidrógeno. Por eso, las consultoras como Idea Ingenieria están trabajando alrededor del hidrógeno, del cual ya se dice que podría ser la solución a los problemas que presentan los coches eléctricos, como la autonomía.
¿Qué es el hidrógeno verde?
A la hora de producir hidrógeno, se emplea un proceso que se llama electrólisis. Aquí la electricidad separa el agua (H₂O) en hidrógeno y oxígeno. El calificativo de "hidrógeno verde" se le da cuando la energía que se emplea a la hora de producir la electricidad necesaria es limpia. Eso quiere decir que no ha generado emisiones de efecto invernadero.
De esta manera, podemos hablar de electricidad que proviene de aerogeneradores o de paneles solares, la cual ayuda a detener el cambio climático que estamos sufriendo en la actualidad.
Hay dos formas fundamentales de obtener hidrógeno verde
La electrólisis se puede llevar a cabo de varias maneras, aunque lo cierto es que casi siempre se usan dos: una es la electrólisis alcalina, y se trata del método más común y se emplea una solución de hidróxido de sodio como electrolito.
Otra es la que se conoce como electrólisis de membrana protónica. Es más eficiente que la alcalina, pero mucho más cara. Aquí, se emplea una membrana protónica que consigue separar el hidrógeno del oxígeno.
¿Qué ventajas presenta el hidrógeno verde?
Esta clase de hidrógeno tiene una serie de beneficios que lo hacen muy interesante, más ahora cuando estamos en una época de transición energética.
Emisiones cero
Gracias al hidrógeno verde no se generan emisiones directas, ni en su producción ni en su uso. Por eso, es una de las mejores opciones si queremos descarbonizar la economía y paliar los efectos del cambio climático.
Es muy versátil
Otro de los beneficios que aporta es que es muy polivalente. Puede alimentar pilas de combustible que generan electricidad, mover vehículos, calentar edificios o emplearse en procesos industriales como los que producen acero o fertilizantes.
Se puede almacenar
Aquí está una de las claves y lo que lo diferencia de otras energías renovables como la eólica o la solar. Estas no se pueden almacenar a gran escala ahora mismo, por lo que dependemos de que haga sol o de tener viento.
Sin embargo, el hidrógeno verde se puede almacenar en tanques y emplearse en el momento en el que se necesite, con independencia de las condiciones climáticas.
Es más seguro que otras fuentes de energía
Pese a que el hidrógeno es inflamable, lo cierto es que lo es mucho menos que otros combustibles que utilizamos a día de hoy, como la gasolina o el gas natural.
De esta forma, es más seguro a la hora de almacenarlo, usarlo o transportarlo. Siempre hay que tener cuidado, pero el riesgo de accidente es menor.
Va a crear muchos empleos
Con el auge de la inteligencia artificial todos estamos preocupados por el empleo en los próximos años, puesto que esta tecnología va a eliminar bastantes trabajos.
Así, muchos trabajadores podrían encontrar empleo con el hidrógeno verde. En los próximos años harán falta miles de personas que produzcan electrolizadores, paneles solares, se encarguen de la construcción de la infraestructura del almacenamiento, etc.